CÓMO ES LA CHULETA DE VACA VIEJA CAPRICHO ORO
Esta chuleta de Capricho Oro es un corte de carne Premium que ha estado madurada en cámaras dry aged durante más de 50 días. Esta maduración le aporta un sabor y una textura únicas que realza su todos los matices de una carne de alta calidad.
Para que disfrutes en tu casa de una carne excepcional como nunca antes lo habías hecho y te traslades a uno de los mejores restaurantes de Galicia.
De la mejor carne de vaca que puede existir, ejemplares de avanzada edad, seleccionados de pequeñas ganaderías gallegas y cuidados hasta el mínimo detalle, siempre pensando en el bienestar animal y con una excelente alimentación en prados naturales para que, por fin, puedas degustar una carne de verdad que no es fácil de encontrar.
El peso de la chuleta es de aproximadamente 500 g, pero al realizarse el corte de forma manual, no es exacto. Es un corte con hueso, el cual le aporta a la carne un mejor sabor.
→ Color: Rojo oscuro.
→ Sabor: Extremadamente sabroso con toques salinos por el pastoreo en la costa gallega.
→ Aroma: Penetrante.
→ Textura: Muy tierna.
→ Grasa intramuscular: Gran infiltración.
→ Grasa de cobertura: Amarilla intensa por su alimentación a base de maíz en el campo.
→ Maduración en seco Dry Aged: Más de 50 días.
ASÍ SON NUESTRAS VACAS CAPRICHOS ORO
De vacas procedentes de pequeñas explotaciones gallegas, alimentadas 100% en el campo que viven en base al bienestar animal. Esos cuidados y alimentación natural hacen que la carne sea de alta calidad.
→ Vacas: Viejas de más de 12 años y muy grandes.
→ Origen de la vaca: Galicia.
Se considera «vaca vieja» a las hembras de vacuno de más de 4 años de edad. La carne de estas vacas tiene un sabor más acentuado y una textura diferente a la vaca joven y ternera, muy apreciada por su calidad.
Pero realmente cuando se aprecia la verdadera calidad y sabor de la carne de estos ejemplares es en las vacas de más edad, como en el caso de los Caprichos gallegos de más de 12 años, las cuáles son más grandes y gordos.
La chuleta es el corte por excelencia, pero chuleta de vacuno mayor y de esta alta calidad es muy difícil de encontrar en carnicerías y supermercados.
Sabemos que no toda la carne es igual y por eso seleccionamos las mejores vacas de pequeñas ganaderías de Galicia para obtener este resultado perfecto, que tanto gusta a los amantes de la carne de vaca vieja, últimamente tan de moda.
Los Caprichos Oro son vacas exclusivas que dan una carne excepcional. Una raza que no siempre está disponible ya que no son muchos los ejemplares de esta raza que pastan por lo prados gallegos.
Nuestra maduración natural en seco de más de 50 días, hace que la carne de un animal de avanzada edad y de gran tamaño y peso, que es más dura, se vuelva tierna y se potencie el sabor y aroma, para así poder degustarla como se merece.
Es por ello que el precio de una chuleta de vaca vieja (auténtico) y madurado de alta calidad, es más elevado que si se trata de carne procedente de vacas jóvenes o terneras con poca o ninguna maduración.
Cocción chuleta
Cómo cocinar una chuleta de vaca premium: pasos sencillos y tiempos precisos
Disfrutar de una chuleta de vaca en su punto ideal es fácil si sigues estos pasos según el método de cocción que elijas.
Preparación previa
- Saque la carne del frigorífico 1-2 horas antes para que alcance la temperatura ambiente. Esto asegura una cocción uniforme.
- Seca la chuleta con papel absorbente para eliminar la humedad y favorecer el sellado.
- Sazona con sal gruesa justo antes de cocinarla. Así resaltas su sabor sin extraer demasiados jugos.
Métodos de cocción y tiempos.
1. Barbacoa
- Caliente la parrilla a fuego medio alto y asegúrese de que las brasas estén uniformes.
- Sella la carne durante 3-4 minutos por lado para formar una costra dorada.
- Cocina a la temperatura deseada desplazándola a una zona con menos calor:
- Poco hecha (temperatura interna 45-48 °C): 2-3 minutos adicionales.
- Al punto (temperatura interna 48-52 °C): 4-5 minutos adicionales.
- Hecha (temperatura interna 52-56 °C): 6-7 minutos adicionales.
2. Sartén o plancha
- Utilice una sartén o plancha gruesa bien caliente. Agregue un toque de aceite de oliva o aproveche la grasa natural de la chuleta.
- Sella la carne a fuego alto durante 2-3 minutos por lado hasta que quede bien dorada.
- Reduce a fuego medio y cocina según el punto deseado:
- Poco hecha : 2-3 minutos más por cada lado.
- Al punto : 4-5 minutos más por cada lado.
- Hecha : 6-7 minutos más por cada lado.
Reposo y corte final
- Deja la chuleta reposar 5-8 minutos cubierta con papel de aluminio para que los jugos se redistribuyan.
- Córtala en tiras finas, siguiendo la dirección de las fibras para un bocado más tierno.
Consejo adicional
Utilice un termómetro de cocina para medir la temperatura interna y garantizar la cocción perfecta.
Envío y entrega
La pieza de carne se corta específicamente para ti desde la cámara de maduración y se envasa al vacío de forma individual.
Desde que se genera el pedido hasta su recepción el tiempo es de 24/72 horas, siempre dependiendo del día y hora en que se pida, tal como se indica en envíos y devoluciones.
El envío se realiza en transporte refrigerado de SEUR Frío para que no se rompa la cadena de frío y la carne llegue a tu casa en condiciones óptimas.
Una vez la carne se entrega a SEUR Frío nosotros realizamos un seguimiento de todos los pedidos enviados pero no podemos asegurar la hora de entrega (habitualmente antes de las 14h) ya que eso depende totalmente de las rutas de entrega de SEUR Frío.
Conservación
Al ser fresco y envasado al vacío, conservándola en frío en el frigorífico, el tiempo hasta su consumo puede ser de hasta 20/30 días aproximadamente, aunque es recomendable cocinarlo en los primeros 5/10 días para poder apreciar sus cualidades de la mejor manera, pasado ese plazo podemos encontrar matices de sabor y olor más fuertes en la carne.
También se puede congelar, es una buena opción para no apurar el margen comentado arriba y así poder cocinarla cuando quieras y sin perder nada de sabor ni textura original, siempre que se congele en su embalaje al vacío y se consuma en el plazo de 3 meses desde su congelación.
Si decidimos congelar, la pieza hay que descongelarla lentamente en el frigorífico, por lo que hay que tener en cuenta que según el tamaño y peso de la pieza puede llegar a ser un plazo de hasta 5 días…
